La noche del 9 de enero de 2010, y tras un período intenso de nevadas, la cúpula esférica del almacén de carbón de la fábrica de cemento de Mataporquera colapsó.
Dicho almacén, construido en 2007, incorporaba una cubierta en forma de cúpula esférica de estructura metálica ligera, diseñada por terceros. Las dimensiones principales de la cúpula eran 65.50 m de diámetro en la base y 22.60 m de altura sobre el nivel de apoyo, constituido éste por un murete perimetral de hormigón armado de 3.70 m de altura. Tipológicamente, la estructura era una cúpula geodésica de doble capa, formadas por barras tubulares de acero de pequeño diámetro con sus extremos recalcados para permitir las uniones.

El propietario, CEMENTOS ALFA S.A., solicitó a la firma MARTINEZ SEGOVIA Y ASOCIADOS un informe para esclarecer las posible causa del accidente. Las conclusiones de dicho informe fueron:
Ø Se aplicaron a la cubierta las cargas estimadas a partir de los datos meteorológicos disponibles en la Agencia Estatal de Meteorología para los días del accidente, así como a partir de la observación directa.
Ø Las condiciones meteorológicas que se dieron el día del accidente fueron las más severas –en términos de altura de nieve caída y de baja temperatura- de toda la vida anterior de la estructura. Estas condiciones eran más desfavorables que las aplicadas por el autor del Proyecto, si bien éstas eran las que recogía la Normativa española vigente en su momento. Por tanto, la Norma no estaba del lado de la seguridad.
Ø De acuerdo con lo anterior, se pudo concluir que el desencadenante del colapso de la estructura fue unas condiciones climatológicas extremas.
¿Cómo evitar esto?
En el diseño de estructuras ante fenómenos de nevadas, y si queremos evitar colapsos, hay que tener en cuenta varios aspectos muy importantes:
1. Las diferentes normativas suelen fijar una carga de nieve constante para las distintas zonas y altitudes en cada país. Esta carga de nieve corresponde al grosor producido por una gran nevada, cuando el frío impide la fusión de la nieve. Pero puede ser mucho peor el caso -probable-en que la nieve fresca actúe como esponja y retenga el agua de la lluvia que eventualmente pueda caer más tarde.
2. Otro de los problemas importantes asociados a la nieve es la acumulación de la misma producida por el viento.
3. Asimismo, es muy improbable que la nieve cuaje sobre superficies con mucha pendiente. Normalmente tenderá a deslizase y caer al suelo o -lo que es peor- sobre otra zona de la cubierta situada por debajo, produciendo no sólo una mayor carga sino un impacto dinámico.
4. Finalmente, en cubiertas a doble nivel, con pared intermedia vertical, la acumulación de nieve sobre la cubierta baja puede ser mucho mayor de lo contemplado en la Normativa.